Gran Canaria no merece tanta desidia

Este verano hemos visto con perplejidad, como dos programas de cadenas de televisión privadas han dado una imagen de Gran Canaria penosa, en general, y perjudicial para su imagen turística. No cuestiono la libertad de expresión ni la veracidad de esas imágenes, pero sí critico y repruebo la intencionalidad y la irresponsabilidad, pues podrían haber captado otras muchas, muchísimas mejores imágenes, pero no les interesó. Creo que los medios de comunicación de masas deben ser responsables y medir el impacto económico y social que sus emisiones pueden ocasionar en estos momentos de crisis. No todo vale y alguien se los tiene que recordar. Tienen que aceptar aunque sean medios privados, que los ciudadanos, las instituciones y los políticos les exijamos esa responsabilidad.
Este es, sin duda, un debate necesario, pero quiero centrar mi reflexión en la desidia de las instituciones con responsabilidades en la promoción turística de Canarias y especialmente las de Gran Canaria. En el primero de los programas emitidos, el cual no nombro, pues no quiero hacerle propaganda, aparece para mi asombro el logotipo del Patronato de Turismo de Gran Canaria, que depende ni más ni menos que del Cabildo Insular de Gran Canaria, concretamente de la Consejería de Turismo. Todos sabemos que un logo no lo ponen gratis, se hace por ser patrocinador o colaborador, y me pregunto ¿cómo es posible que el Cabildo de Gran Canaria haya patrocinado semejante programa?, ¿cuánto dinero aportó?, ¿cómo es posible que con tantos asesores, no haya nadie que controle en ese Cabildo a dónde van los dineros públicos?
Como grancanaria me duele que esto ocurra y me indigna como canaria que los dirigentes del PSOE y NC que dirigen el Cabildo quieran evadir responsabilidades pidiendo a todas las instituciones que defiendan a Gran Canaria. Es el colmo del cinismo, ¡claro que hay que defenderla! De eso y de otras muchas cosas más, pero sobre todo de su incapacidad e incompetencia. Siempre echando balones fuera o echándonos a pelear a los canarios. Soy canaria y estoy cansada de ver como nos sacamos los ojos unos a los otros, y mientras, los que nos echan a pelear, poniéndose las botas. Eso es lo fácil, la forma más rápida para el PSOE y NC de crecer en votos, también en su momento lo hicieron otros en otras islas, pero es de una gran simpleza y cobardía, venga de quien venga.
Dónde está la autocrítica, ¿o es que nadie asume responsabilidades?, ¿nadie da explicaciones? En otras islas, es probable que alguien hubiera dimitido, pero no por pedirlo la oposición sino la sociedad civil y, por vergüenza propia.
Gran Canaria necesita despertar, es responsabilidad de todos, desde los políticos que debemos ser autocríticos, pero también de los agentes sociales y económicos que tienen que darnos caña responsablemente a los políticos y no elogios, tiene que exigir a todas y a cada una de las administraciones que cumplan con sus responsabilidades. Y en materia turística, el principal motor de nuestra economía, es una grave irresponsabilidad en estos momentos no poner al frente de dichas responsabilidades a profesionales competentes, expertos en la materia, que tenemos muchos en Canarias.
Otro ejemplo de esta dejadez y desidia que se ha implantado en Gran Canaria lo tenemos en uno de los municipios más ricos de España, San Bartolomé de Tirajana, que a día de hoy ni siquiera se ha dotado de un Plan de Ordenación Urbana para planificar su remodelación como municipio turístico, nadie se implica en la formación de su personal para prepararlos para el desarrollo turístico sostenible y de calidad, nadie se preocupa de tener unas infraestructuras al nivel europeo que exigen los visitantes. Yo creo que todo el mundo lo sabe y los primeros, los que tienen las riendas del propio Ayuntamiento, pero legislatura tras legislatura, todo sigue igual o peor.
Le guste o no a algunos, Gran Canaria es una GRAN Isla y no podemos permitir que siga perdiendo todo su prestigio, y para ser más clara, por si las editoriales del Día me siguen insultando en sus absurdas peroratas, (si no le gusta mi opinión, tendrá que aguantarse, pues a mí tampoco me gustan las suyas) Gran Canaria, es una isla con muchas posibilidades, conocida como el continente en miniatura y con uno de los mejores climas del Mundo, pero no le dejan levantar cabeza, unos por avaricia y envidia, otros por dejadez de sus funciones y otros por desidia.
Pero podemos cambiar. Para hacerlo sobra la charlatanería, la demagogia y la cobardía y hace falta autocrítica, unidad en lo político, en lo social y en lo económico; complicidad, ilusión, capacidad. De todo eso tiene la sociedad de Gran Canaria, y mucho, solo hace falta canalizarlo, que haya liderazgo y ponerlo urgentemente al frente de sus principales instituciones. Pero líderes de verdad, no sólo que hablen y hablen. Eso ya no nos vale para nada.