Crear empleo: un esfuerzo colectivo

Noviembre nos ha traído un minuto de optimismo en los datos de empleo. No sólo hemos confirmado la tendencia en la capacidad para frenar el paro, sino que hemos creado empleo. De hecho, Canarias se encuentra entre las Comunidades Autónomas que más ha reducido el desempleo durante el último año. Respecto al pasado mes de noviembre, el paro registrado en Canarias ha disminuido en 3.580 personas. En la evolución interanual, Canarias es la segunda Comunidad Autónoma donde menos ha subido el paro, un 3,18%, frente al 6,24% de media nacional.

Es la expresión de un esfuerzo colectivo. Un esfuerzo de las administraciones; de las políticas activas de empleo impulsadas por el Gobierno de Canarias; de nuestro tejido productivo generador de empleo; y de las personas desempleadas que luchan, día a día, por buscar salidas a su situación personal. En medio de esta crisis que nos azota a todos, sin duda, son datos esperanzadores, pero tenemos que ser precavidos. Tenemos que seguir trabajando para que las miles de personas -con nombres y apellidos- que siguen en el paro, puedan acceder a un puesto de trabajo. Esa es nuestra preocupación y nuestra ocupación.

Efectivamente, 2010 está siendo un año difícil para la economía española y se evidencia en el aumento del desempleo. Las tardías medidas puestas en marcha por el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero no están teniendo reflejo en el crecimiento de la actividad económica, a pesar de que otros países de la Unión Europea, como Alemania, ya están empezando a remontar. La economía española ha perdido más de 2 millones de puestos de trabajo y la tasa de paro ha aumentado en 12 puntos desde que se inició la crisis.

La recuperación del empleo depende directamente de que se recupere la actividad económica, y está debe ser la prioridad de todos los gobiernos, locales, insulares y autonómicos, con responsabilidad y sin excusas. No obstante, no cabe duda de que ante una crisis internacional como ésta, es el Gobierno de España el que tiene la principal responsabilidad de dar un giro a las políticas económicas desde la Administración del Estado y abordar, sin más excusas, las reformas estructurales que necesita nuestra economía.

En esta coyuntura, el Gobierno de Canarias tiene el compromiso y la obligación de proteger a los más perjudicados, especialmente, a las personas que han perdido su empleo y, sobre todo, a aquellas que necesitan apoyo para no quedar excluidas de por vida del mercado laboral.

Desde el Servicio Canario de Empleo, y con las políticas activas de empleo, se ofrece a las personas desempleadas la oportunidad de adquirir formación y experiencia laboral.
Las acciones puestas en marcha por el Gobierno de Canarias hasta el momento, en el ejercicio 2010, han tenido al menos 64.000 beneficiarios entre personas desempleadas que han sido contratadas para incrementar su experiencia laboral y mejorar sus competencias profesionales, así como personas que han sido atendidas por los servicios de orientación, formación e inserción laboral y que han recibido cursos de formación. Además, hay que sumar las actuaciones orientadas a la promoción de la iniciativa emprendedora y la actividad económica. El importe total de las medidas puestas en marcha, cuando finalice 2010, superará los 274 millones de euros.

Los recursos que destina el Servicio Canario de Empleo habrán permitido este año, la contratación de más 42.000 personas desempleadas, a través de programas de experiencia profesional. Programas que se materializan en los convenios con ayuntamientos, cabildos y organismos autónomos; programas de escuelas taller; talleres de empleo y casas de oficios; inserción de personas con discapacidad o programas de formación con compromiso de contratación. Más de 28.500 personas han sido atendidas a través de la red de orientadores laborales. 2.400 personas se han contratado desde los programas dirigidos a personas con discapacidad o con riesgo de exclusión social. Los programas de fomento de la emprendeduría y el trabajo autónomo son cada vez más demandados y, este año, se han destinado en ellos 6,5 millones de euros.

Es indudable que la ejecución de estas medidas ha contribuido a contener el aumento del paro en lo que va de año. Hablamos de nuevo de cifras. Pero, en este caso, en positivo. Es una satisfacción comprobar que el dinero público invertido en políticas activas de empleo beneficia a muchas familias.

Pero esta capacidad de crear empleo tendría un efecto más directo en disminuir el desempleo, si no fuera porque la población activa en Canarias sigue creciendo. Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en este último trimestre 5.800 personas nuevas se han incorporado al mercado laboral. Pero si miramos un periodo más largo, Canarias ha crecido un 45% entre 1999 y 2009. En diez años, se han incorporado a nuestro mercado laboral 340.850 personas, de las que 208.000 proceden de otros países; muchas de ellas encontraron un empleo pero otras muchas engrosan hoy las listas del desempleo, lo que demuestra que nuestro mercado laboral atrae a miles de personas para buscar una oportunidad en Canarias, pero que la capacidad para absorberlas es limitada y, más aún, en momentos de crisis.

Y es que somos lo que somos. Islas, con un territorio limitado, rodeados de mar, y con una capacidad reducida para dar salida a tal cantidad de población activa.

Debemos abrir un debate social. Un debate real. En este caso, no cabe la demagogia. Debemos dejar de hablar en términos de cifras y de porcentajes sin hacer previamente una reflexión sobre qué está pasando y por qué -aunque creemos empleo- seguimos teniendo tanto desempleo. Es una tarea común de todos. Y un ejercicio de responsabilidad.

Han sido periodos muy duros que, este año, estamos empezando a dejar atrás. No obstante, aunque la coyuntura ha mejorado con respecto a los años 2008 y 2009, no debemos, ni podemos, conformarnos porque nos encontramos ante una difícil situación que sigue afectando a miles de familias en el Archipiélago. Una situación que preocupa y ocupa al Gobierno de Canarias como su primera tarea: hacer todo lo que está en sus manos, y más, para invertir esta tendencia.