Las inauditas lecciones del partido que más empleo destruye en Europa

La diputada socialista, Francisca Luengo, publicó ayer un artículo en este mismo diario, titulado "Coalición Canaria: propaganda y fracaso social", en el que sin ruborizarse lo más mínimo hacía un recorrido sesgado sobre su miope visión sobre la política social del Gobierno de Canarias y, por supuesto, sin realizar ninguna autocrítica sobre los males que sufre España por la nefasta política del presidente socialista, José Luis Rodríguez Zapatero.
Que el PSOE critique con o sin argumentos al Gobierno que preside Paulino Rivero es una constante en la trayectoria socialista en el Parlamento. Forma parte de una estrategia orquestada con la que este partido pretende desprestigiar la gestión del Ejecutivo a base de adjetivos altisonantes y con mensajes recurrentes carentes de contenido. En definitiva, mucha demagogia. Y la demagogia, señores socialistas, no genera ni un solo empleo.
La diputada socialista comenzaba su artículo refiriéndose a una intervención del presidente del Gobierno de Canarias en el último debate sobre el estado de la nacionalidad acerca de la crisis y las medidas del Ejecutivo para paliar los efectos de la devastadora recesión económica que lamentablemente sufrimos en todo el mundo.
Yo también voy a recurrir a la hemeroteca y a los diarios de sesiones para refrescar la memoria del PSOE. Es importante que todos los ciudadanos recuerden que mientras en Canarias alertábamos, en 2008, sobre la inminente crisis económica, los socialistas, enfrascados en su denodado esfuerzo por permanecer en La Moncloa, negaban una y otra vez que España cayese en las redes de la recesión. El 14 de enero de 2008, en plena subida de las hipotecas y las cifras de desempleo, Zapatero se desmarcaba con las siguientes declaraciones en el diario El Mundo: "la crisis es una falacia. Puro catastrofismo". Palabras que tanto él como su partido arrastran como una losa en medio de la crisis más virulenta que hemos sufrido desde la Segunda Guerra Mundial.
En aquel entonces, a tan sólo dos meses de las elecciones generales, el Ejecutivo canario al que usted acusa de incumplir sus compromisos ya había diseñado los pilares del primer plan de empleo para ayudar a las primeras víctimas de la desaceleración económica. Mientras en 2008, el Gobierno de Canarias contrataba a 18.000 personas a través de los planes de empleo, el Ejecutivo de Zapatero, ajeno a una realidad palpable, se gastaba más de 134 millones de euros en Publicidad. Concretamente, 134.515.105 euros, según se indica en el Plan de Publicidad y Comunicación Institucional.
Es inaudito que una diputada que pertenece al partido que más empleo destruye en Europa trate de dar lecciones sobre políticas sociales. No deja de ser sorprendente que Luengo lance dardos a diestro y siniestro, pese a que la carta de presentación de su partido son los 3.923.603 parados que hay en España. Una carta de presentación que, por cierto, ha sido motivo de comentarios jocosos por parte de la prensa económica europea (Finacial Times, The Economist) tras la promesa de Zapatero de sacar a la UE de la crisis económica.
El PSOE alude una vez más al grado de cumplimiento de la ley de dependencia con argumentos que han sido rebatidos hasta la saciedad por la consejera de Bienestar Social con datos objetivos. Como, al parecer, no termina de entenderlo, yo se los recuerdo. En Canarias cohabita la ley de dependencia del Gobierno del Estado y el propio sistema de atención a las personas dependientes con el que contamos en las Islas desde mucho tiempo antes que el implantado por Zapatero.
Y las cifras hablan por sí solas. De estos 119.326.334 euros gastados a 31 de octubre de 2009, para atender a las personas dependientes en Canarias, el Estado aportó tan sólo 21.269.784,90 euros. El resto, lo puso el Gobierno de Canarias. Y este año vamos más allá con un incremento del 97% del presupuesto en materia de dependencia.
Y, aunque para el PSOE haya sido una mala noticia, sus críticas no frenarán la contratación de 80.000 personas en los próximos 18 meses gracias a los 420 millones de euros presupuestados por el Gobierno de Canarias. En definitiva, los socialistas practican la demagogia y nosotros aportamos las soluciones.