La marcha atrás del PP tiene retranca

Tras reducir los recursos al sistema sanitario y expulsar a los inmigrantes de la atención primaria, ahora -en periodo electoral- reincorporan a los inmigrantes pero no incrementan el presupuesto sanitario

Viñeta de Padylla.

El Partido Popular ha decidido devolver el derecho a la atención sanitaria a los inmigrantes, Una decisión que hay que analizar en el contexto del momento en que se produce y los cambios introducidos por el mismo partido en el sistema. Como podrán comprobar en este texto, la conclusión es evidente: se trata de una medida electoralista, una muestra más de hipocresía política del partido y de los miembros del mismo que han repetido hasta la saciedad la mentira de que gracias a ellos se garantizaba la sanidad universal y el servicio público. Pero, lo peor, es que no asumen la autocrítica de los problemas derivados de su decisión arbitraria e injusta.

A través de la prensa hemos conocido el impacto que esta decisión ha tenido en millares de personas. De humildes trabajadores que han hecho posible el crecimiento de nuestro país y que en esta situación de crisis han sido doblemente víctimas de las políticas del Partido Popular al limitar los derechos y oportunidades para trabajar y al expulsarlos del sistema público sanitario. Una medida que ha ocasionado la pérdida de vidas humanas o el riesgo de numerosos profesionales de la sanidad que han atendido a personas que necesitaban de su atención y de los recursos públicos para evitar la muerte o que sus dolencias se convirtieran en crónicas e insalvables.

Pero no sólo los inmigrantes han sido perjudicados por las políticas del PP. En estos años, entre otras muchísimas medidas que profundizaban en la desigualdad social, cabe destacar que también impusieron el pago de numerosas medicinas, el copago de otras, el de las prótesis, el pago de ambulancias y la reducción de personal. Paralelamente iban reduciendo drásticamente el presupuesto para Sanidad y otros servicios sociales fundamentales sin que los recortes llegaran a áreas de interés electoralista o particular, como el caso de las contrataciones en el área de Defensa o la construcción de líneas de AVE innecesarias o circunvalaciones de carreteras en feudos electorales del PP.

Pero este caso de la pérdida del derecho de los inmigrantes a que les atendieran en los centros sanitarios, es el ejemplo más claro y contundente de la hipocresía del Partido Popular, ya que lo acuerdan en fechas electorales y nos intentan engañar con una medida que nos genera muchísimas dudas. En primer lugar, deberían explicar a cuántas personas han perjudicado, cuántas vidas ha costado esta decisión y cuál ha sido el verdadero ahorro que ha producido la medida. Porque mucho nos tememos que al imposibilitar la atención primaria a los inmigrantes, éstos han recurrido a los servicios de Urgencias, lo que ha supuesto el encarecimiento de la atención y el colapso de estos servicios para el resto de ciudadanos y usuarios.

A nadie se le escapa que esta es una medida oportunista, pero lo más peligroso de esta decisión es que no viene acompañada de recursos suficientes para recuperar los niveles de calidad asistencial que la sanidad en España tenía antes de la llegada del PP al poder. Estamos ahora en una situación muy delicada y peligrosa, ya que al recorte de financiación y servicios, se suma la incorporación de nuevos usuarios de la Sanidad Pública

Estamos ahora en una situación muy delicada y peligrosa ya que, al recorte de financiación y servicios, se suma la incorporación de nuevos usuarios de la Sanidad Pública, incorporación de nuevos medicamentos como el de la Hepatitis C, y otras muchas nuevas promesas que nos traerá la campaña electoral, pero sin la financiación adecuada, lo que pone en peligro la sostenibilidad del Sistema Público Sanitario, ya que es falso el eslogan del Partido Popular de que se puede hacer más con menos, es esta una burda estrategia de acabar con el sistema público.